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Nos cepillamos los dientes a diario, a veces de forma tan autómata que no caemos en la cuenta del tiempo que le dedicamos. Hoy hablamos de cuántos minutos son necesarios para lograr una buena limpieza bucal, de cuál es la técnica adecuada y, entre otras cosas, de qué conseguimos al pasar el cepillo por cada pieza dental después de las comidas. ¡Por fin todas tus dudas resueltas!

Cuando nos cepillamos los dientes eliminamos la placa bacteriana

Los expertos recomiendan cepillar los dientes con un cepillo de dureza media y una pasta dentífrica fluorada (la cantidad que sea equivalente al tamaño de un guisante) después de cada comida porque es la mejor forma de eliminar la placa bacteriana que se acumula tras ingerir alimentos y bebidas.

Bacterias, hongos y virus que, de permanecer en la superficie del diente, suponen el riesgo de causar caries u otras enfermedades dentales como la gingivitis. Y es que, no cepillarse los dientes adecuadamente, con el paso de los días, puede activar la respuesta inmunitaria del organismo y desencadenar en inflamaciones o afecciones bucales.

Entonces, ¿cuánto tiempo hay que cepillarse los dientes?

Se ha demostrado que lo mejor para cuidar de nuestra salud bucodental es cepillarse los dientes durante al menos dos minutos tres veces al día o después de cada comida.

Lo que varios expertos se plantean ahora es si, a mayor tiempo de cepillado, mayor limpieza y menor riesgo de que aparezcan las caries. Faltan investigaciones al respecto, pero ya hay odontólogo que se aventuran a decir que mejor tres minutos que dos.

Dos o tres minutos para los adultos y también para los niños. Para ellos se aconseja el cepillado dos veces al día, preferiblemente mañana y noche, para pasar a hacerlo 3 veces al día a partir de los 8 o 9 años que es cuando muchas de las piezas dentales ya se han cambiado. Además, es entorno a esta edad cuando los niños ya han adquirido bien el hábito de lavarse los dientes y lo podrán hacer solos. 

¿Justo después de la comida? ¿O es mejor esperar unos minutos?

Hay que lavarse los dientes después de comer, pero no justo nada más terminar. De hecho, según lo que se haya comido, es preferible esperar unos minutos antes de cepillarse los dientes. El motivo es que la boca tiene una acidez con un pH neutro. Al tomar alimentos o bebidas, la acidez sube reblandeciendo el esmalte. La saliva es la que se encarga de neutralizar dicha acidez para que el esmalte se endurezca de nuevo, pero lo solo lo hará pasados unos minutos.

Igual de importante es emplear la técnica de cepillado adecuada

No te cepilles dientes y muelas con demasiada fuerza, pasa el cepillo también por la lengua, utiliza una pasta de dientes acorde a tus necesidades y además emplea la técnica de cepillado correcta. Puede ser, por ejemplo, realizando suaves movimientos circulares sobre cada pieza, de arriba abajo abarcando también la zona de las encías o bien colocando el cepillo a unos 45º respecto al eje del diente. ¡Lograr tener una excelente higiene bucal será muy sencillo!

Cepillo, sí, pero también hilo dental y enjuague bucal

El cepillo de dientes evita que se acumule el sarro pero, como no llega a las zonas interdentales, serán necesario usar el hilo dental para que se pueda eliminar bien los restos de comida que se depositan entre los dientes y las muelas.

Y además es necesario usar un enjuague bucal sin alcohol ya que, gracias a su agente antiséptico, se matan los microbios infecciosos que quedan adheridos a las paredes de la boca.

Y para que tus dientes estén mejor cuidados aún acude a revisiones periódicas con el equipo de Odontalia. Te aconsejaremos sobre los mejores tratamientos para que tú y tu familia disfrutéis siempre de una buena salud bucodental. ¡Llámanos y pide tu cita!